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Monseñor Romero

Jon Sobrino



PROLOGO

El 24 de marzo de 1990 se cumplen diez años del martirio de Mons. Romero cuando celebraba la eucaristía en el altar del Hospital de la Divina Providencia. Su muerte no fue una muerte más, sino que fue --como la de Jesús- asesinato y martirio.

En este décimo aniversario es una obligación recordar a Mons. Romero, pues olvidarlo sería ingratitud. "¡Ay de los pueblos que olvidan a sus mártires," dice don Pedro Casaldáliga. Es también muy importante, pues en los mártires encontramos luz para vivir como cristianos y como seres humanos. Es, por último, muy necesario pues la sangre de los mártires, su incondicional amor, es ánimo y fuerza para mantener la fortaleza en el duro camino de la vida y de la fe.

Con este libro queremos colaborar a la celebración de este décimoaniversario. En él hemos recogido varios escritos sobre Mons. Romero ya publicados en los diez últimos años y los hemos estructurado de la siguiente manera. En la primera parte, la más larga y analítica, reflexionamos sobre la figura de Mons. Romero como creyente, arzobispo y salvadoreño, como profeta e inspirador de la teología. La segunda parte, muy breve, recoge dos homilías sobre Mons. Romero en las cuales se intenta sintetizar la totalidad de su persona y su obra; es decir, en una palabra, quién fue y quién es Mons. Romero. Para este libro hemos escrito un largo artículo introductorio, vivencial y personal: "Mi recuerdo de Mons. Romero." A ello me han movido varias razones. Ante todo, el agradecimiento personal --no hay agradecimiento que a la corta o la larga no tome la palabra-, y el deseo de poner calor humano a lo que en otros artículos se analiza más serenamente. Creo, además, que es muy importante reafirmar que Mons. Romero no es sólo un concepto analizable ni un mito venerable, sino que fue alguien muy real, alguien a quien "hemos visto, oído y tocado," como decían los primeros cristianos de Jesús.

Recordarlo es una forma importante de reactualizarlo, de volver a hacerlo real. Por último, el tiempo pasa y cada vez tenemos que vivir más de los recuerdos para hacer presente a Mons. Romero. En El Salvador la mitad de la población de hoy no lo conoció ya personalmente.

Este libro recoge, pues, análisis, homilías y recuerdos. Su limitación consiste en que estos escritos son coyunturales, parciales por lo tanto, no hemos podido evitar algunas repeticiones. Con todo, pensamos y esperamos ofrecer una visión de lo más importante de Mons. Romero para que él siga inspirando e iluminando. Para terminar digamos que este libro es sólo un aporte, entre otros muchos, para este décimo aniversario. Otros aportarán de otra manera. Los pobres, sobre todo, con sus recuerdos, con los cantos y poesías que componen en su honor, con su sufrimiento y esperanza son quienes más aportan, quienes mejor lo recuerdan y mejor lo hacen presente. Esperamos que nuestros recuerdos y nuestra reflexión teológica colaboren también a mantener vivo a Mons. Romero.


Fuente: Sobrino, J. (2008). Monseñor Romero. San Salvador: 
              UCA Editores.

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